Queridos niños
Con mucha alegría te damos la bienvenida al inmenso y maravilloso mundo de la oración con la Biblia.
¿Sabías que antes que tu mamá, tu papá o cualquiera de las personas que más te quieren, hubo alguien que pensó en ti como nadie más podría hacerlo en este mundo? Pues sí. así fue, y ese alguien es Dios. Dios te amó mucho, pensó lo mejor para tí, se ocupó de tí antes de que nacieras. “Antes de que nacieras te conocí y te consagré”, le dijo Dios a Jeremías. “Tú me tejiste en el seno de mi mamá”, dice le Salmo 139.
Pero te digo todavía más: Dios quiso que conociéramos su rostro, por que cuando uno ama alguien uno siempre quiere verle la cara. También quiso lo que quería de nosotros. Por eso vino al mundo y nos mostró su rostro en su hijo Jesús, en él nos sonrío, con sus brazos nos abrazó, personalmente se ocupó de nuestras necesidades más importantes y por su boca nos habló. Él murio por nosotros, así nos mostró que su amor es en serio y que era capaz de hacer lo que ningún otro haría por nosotros. Pero Dios Padre los resucitó y él ahora está vivo en medio de nosotros, es más, está ahora aquí conmigo y contigo, siempre dispuesto a poner su amor dentro de nosotros, es decir, su Espíritu Santo, para que vivamos, amemos y ayudemos a los demás como él.
Lectio Divina para niños discípulos misioneros de Jesús
Por medio de este nuevo programa emprendido por el Centro Bíblico Pastoral para América Latina (CEBIPAL) del CELAM, junto con las SOCIEDADES BÍBLICAS UNIDAS, hacemos un primer aporte al discipulado misionero de los niños. Los niños formados en este programa que se ha denominado “Discipulitos misioneros”, fortalecerán su identidad cristiana, caminarán juntos en comunidad, aprenderán a sostener una relación profunda y continua con el Señor con la ayuda de la Biblia, serán valientes misioneros de Jesús en sus familias, comundiades, escuelas e interpelarán proféticamente, como el niño Daniel, a su sociedad.